ALONSO CARTÚ
Arquitecto de 33 años, actualmente se encuentra experimentando en diseño, escultura y artes visuales. A lo largo de los últimos seis años se ha dedicado al uso del barro como una herramienta de expresión.
En el 2010 mientras estudiaba arquitectura en París, por primera vez estuvo en contacto con la cerámica como medio para introducir sus ideas en el mundo del arte contemporáneo; un año después al regresar a México formo parte de diferentes talleres para aprender y dominar la técnica. Pasó tres años en el taller de cerámica de Carmen Carrión, después dos años en el taller del maestro ceramista Alberto Díaz de Cossío, y últimamente a seguido los cursos de cerámica del CIDI UNAM en Ciudad Universitaria.
En el 2014 fue escogido como uno de los cuatro artistas invitados a formar parte de la nueva campaña de Chrysler “Somos Creadores”, en la cual presentó una instalación escultórica de doscientas manos de cerámica montadas sobre una estructura de acero de seis metros.
En el mismo año tuvo lugar su segunda exposición individual en la Ciudad de México; “Corazón al vacío”, una especie de retrospectiva que comunicaba un mensaje intersecto entre la vida y la muerte a través del lenguaje de la cerámica y el bronce.
En 2015 recibe el premio Abraham Zabludovzky a la mejor tesis de composición arquitectónica con el proyecto Ruinas Contemporáneas intervención en la ex hacienda de Apanquetzalco. Justo después de recibir su titulo de arquitecto decidió abandonar su país natal para descubrir más acerca de la escultura, el arte y las antiguas técnicas de la cerámica y porcelana japonesa. Por los siguientes tres meses visito diferentes ciudades y talleres dedicados a la alfarería y quema de piezas en alta temperatura. También durante los noventa días de su camino por el oriente persiguió con la lente de su cámara la primavera a través de las principales ciudades y templos de Japón; un año después lanzo en FONDEADORA la campaña para juntar 155K MXN para la edición del libro “SAKURA 90 días en Japón”
Entre 2016 y 2017 presento la colección de piezas en cerámica y oro “HARAJUKU El llanto asimétrico” en las galerías CC186, Centro cultural Tetetlán, Latitud Gallery y Galería Oscar Román de la Ciudad de México
Actualmente vive en Nueva York estudiando un MFA Fine Arts en Parsons.